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Tipos de lesiones costales

A continuación, exploraremos las principales lesiones costales que pueden ser tratadas mediante osteopatía.

Esguince de costillas

Los esguinces costales suelen resultar de contusiones o movimientos forzados de rotación del tronco, provocando una subluxación en la articulación costocorpórea o costotransversa, lo que estira o desgarran los ligamentos. Este tipo de lesión se manifiesta con un dolor agudo que se intensifica al inspirar, rotar el tronco o toser. En ocasiones, el esguince de las dos últimas costillas puede imitar un síndrome nefrítico. Además, puede haber una fractura o fisura asociada que no se detecta en radiografías.

El dolor generalmente dura hasta tres semanas; si persiste más tiempo, se debe considerar la posibilidad de una fractura o fisura.

Para diagnosticar un esguince, se examina la costilla (preferiblemente en la parte anterior) moviéndola hacia abajo y luego hacia arriba. Si el dolor se presenta al moverla en una sola dirección, indica esguince. Si el dolor ocurre en ambos sentidos, podría tratarse de una fractura. La ausencia de dolor en ambos sentidos sugiere subluxación, confirmada si la manipulación alivia el dolor; de lo contrario, es un esguince.

Protocolo terapéutico para esguince de costillas:

  1. Manipulación de las vértebras dorsales bloqueadas.
  2. Manipulación de la costilla si hay subluxación asociada (generalmente posterior).
  3. Técnicas de estiramiento en la parte posterior y lateral del tórax.
  4. Aplicación de un vendaje funcional que inmovilice varias costillas para reducir el movimiento durante la respiración en el hemotórax afectado, usando tres o cuatro tiras de vendas autoadhesivas.

Fractura de costilla

Cuando hablamos de fractura de una sola costilla, se puede presentar como una fractura de un solo trazo o de varios trazos (la última requiere atención médica urgente). Las fracturas suelen ocurrir en la 4ª, 5ª, 6ª y 7ª costilla, siendo los sitios de fractura más comunes el ángulo posterior y el cuerpo lateral.

En la prueba de movilidad, el dolor se siente al mover la costilla en ambos sentidos. La radiografía suele confirmar la fractura, aunque a veces se usa un diapasón que produce dolor por vibración en la costilla. Si se sospecha de metástasis ósea, puede haber dolor y un cambio en el sonido debido a la densidad ósea alterada en el área metastásica.

Protocolo terapéutico para fractura de costilla:

  1. Verificar la movilidad de la costilla y realizar la manipulación si es necesario.
  2. Aplicar un vendaje funcional mientras la fractura está en proceso de consolidación.

Neuralgia intercostal

La neuralgia intercostal es una neuropatía por atrapamiento que causa dolor a lo largo de la costilla siguiendo el trayecto del nervio. El dolor se intensifica durante la inspiración debido al aumento de la tensión en los músculos intercostales y la reducción del diámetro lateral de la costilla.

La fisiopatología es similar a la ciática: hay edema en el agujero de conjunción o en el espacio intercostal. En el primer caso, se debe manipular la vértebra; en el segundo, se emplean técnicas de estiramiento.

Para el diagnóstico, se deben considerar las tres ramas del nervio intercostal: posterior, lateral y anterior. La neuralgia se puede localizar en puntos gatillo correspondientes a estas ramas. Si hay dolor al presionar el punto gatillo, el dolor se irradia a lo largo de la costilla.

Protocolo terapéutico para neuralgia intercostal:

  1. Manipulación en la neuralgia posterior.
  2. Técnicas de estiramiento para la neuralgia lateral.
  3. Técnicas manipulativas para la neuralgia anterior.
  4. Tratamiento del punto gatillo.

Síndrome de costilla comprimida

El síndrome de costilla comprimida es más común en pacientes mayores (75-80 años), especialmente mujeres. Se relaciona frecuentemente con cifoescoliosis severa y retracción muscular significativa en la zona afectada. También puede desarrollarse una pseudoarticulación entre las costillas y los cartílagos costales, que provoca fricción y inflamación durante la respiración, y puede haber fricción con la cresta iliaca del mismo lado.

Este síndrome se manifiesta con dolor anterior en las costillas y la cresta iliaca, que no responde a tratamientos convencionales. Se presenta generalmente entre la 9ª y la 12ª costilla, con hipermovilidad costal.

Protocolo terapéutico para síndrome de costilla comprimida:

  1. Tratar las fijaciones intercostales y articulares para reducir la hipermovilidad anterior.
  2. Aplicar técnicas de estiramiento a los músculos acortados: intercostales, cuadrado lumbar, psoas ilíaco y espinales.
  3. Emplear técnicas funcionales para disminuir el tono muscular.